El empresario varillense Ing. Eliseo Arrarás junto al varillense radicado en EEUU Héctor Crena realizaron ya gran parte de la gran aventura que busca unir el país del norte con la ciudad más austral, Ushuaia en Tierra del Fuego.

Tal como estaba previsto, tuvo lugar a mediados de mayo el arribo a la ciudad de Las Varillas.

Entrevistamos al Ing. Eliseo Arrarás a las horas de pisar suelo varillense y nos dijo: » Llegué a Las Varillas, luego de 16.250 Km, 3.150 lts. de Nafta en 53 cargadas, 373 horas de marcha, 58 días de viaje, 14 países (USA, México, Guatemala, Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina ) 28 fronteras (a Chile entramos desde Perú y Bolivia) 36 lugares donde dormimos, un promedio de 43,5 Km/hora, solo 3 coimas, sin pinchar una sola goma, sin ningún inconveniente mecánico, ni de seguridad»

Esta hermosa aventura se inicio en  Key West (Los Cayos) EEUU y tiene como destino a Ushuaia en Tierra del Fuego . Recorrieron en  USA los Estados de Florida, Alabama, Luisiana y Texas, luego viajaron a  México, Guatemala, Salvador, Honduras y ahora están  saliendo de Nicaragua rumbo a Costa Rica.


Son 18.000 km en cuatro etapas, Key West-Geinesville (concluida), Gainesville (donde reside Héctor Crena)-Panamá (en ejecución), luego cruzaran el vehículo en un conteiner por barco a Colombia, (son 15 días)(no hay ruta porque esta el Tapón de Darien, 160 Km de montaña, selva y ríos) luego es el turno del trayecto  Cartagena-Las Varillas. Por último, a fin de año, realizaran el tramo Las Varillas-Ushuaia.

Le preguntamos sobre el aspecto económico, para conocer sobre los recursos que se necesitan para semejante aventura. Eliseo Arrarás nos explicó: » la inversión fue de 11.650 Dólares dividido entre tres (incluye U$S 2.720 para pasar el vehículo en contenedor de Panamá-Colombia y U$S 2.950 de nafta)»

Con gran parte del itinerario realizado, y con la enorme oportunidad de conocer desde adentro a parte de los diferentes países latinoamericanos, le preguntamos desde VIVE sobre esta experiencia de observación, nos dijo: «Casi toda Latinoamérica desfiló ante mis ojos, desde la miseria de las fronteras, hasta el lujo de sus capitales. Me movilizó, me emocionó, me conmovió, me dio tantas alegrías como tristezas. Sentí los años de fracasos y corrupción de muchos gobiernos en muchos países, que sembraron pobreza y falta de expectativa.
Sin duda alguna (más allá de lo que tira el corazón) cuando uno entra a Argentina, después de recorrer de punta a punta tantos países, se da cuenta que vivimos en el mejor, es lo más desarrollado del subdesarrollo.
Si sentí que los otros, muy despacio, van para adelante, pero nosotros, muy rápido, vamos para atrás.
Sigo amando nuestra américa, con sus más, con sus menos, está ahí, si pueden visítenla, los va a tocar profundamente.
Cada rostro, cada paisaje, cada huella de los pueblos originarios y cada iglesia levantada para convertir y adoctrinar a sus ancestrales habitantes muestran nuestra historia».

Para culminar, Eliseo hace un balance sobre la experiencia de vida en la que se convirtió esta aventura. «Es una inmersión profunda a nuestros orígenes, nuestro pasado y nuestra ruda realidad.
Sin embargo subyace la alegría, la sonrisa, la predisposición, la amabilidad, el respeto y el buen trato, en el seno de cada país que amablemente nos ha recibido, con el mayor cariño. Los recordaremos siempre»