La Fiscalía de instrucción y Familia de Primer Turno de Río Cuarto, a cargo de Pablo Javega, solicitó al Juzgado de Control y Faltas el sobreseimiento de una mujer que, en septiembre de dos mil veintidós, había lesionado a su pareja golpeándolo con una maza en la cabeza. El herido quedó con secuelas permanentes que han afectado sus facultades cognitivas y motrices. La investigación demostró que dicha mujer se encontraba inmersa en un ciclo de violencia de género crónico y proyectado en múltiples formas que el lesionado desplegaba sobre ella. Con una perspectiva de género se logró verificar que la conducta de la imputada se encontraba amparada por una causa de justificación (legítima defensa).