El gobierno nacional dictaminó hoy la conciliación obligatoria para la paritaria metalúrgica entre la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) a pedido de las cámaras empresariales del sector que exigieron al Ejecutivo que obligue al sindicato a “agotar las instancias de diálogo”. A partir de la resolución de la secretaría de Trabajo, el paro anunciado por la entidad gremial quedó suspendido así como cualquier “represalia de cualquier tipo” por parte del sector empresarial.
La medida interpuesta por el gobierno regirá por 15 días a partir de mañana, y establece que, según la normativa, deberá “retrotraerse la situación a la existente con anterioridad al inicio del conflicto”, como marca el artículo 11 de la Ley 14.786.
El gremio conducido por Abel Furlán denunció hoy que “desde diciembre pasado el sector empresario se niega a reconocer incrementos salariales que acompañen el índice de inflación”, sostuvo la entidad.
La UOM reclamó un aumento salarial del 35% a partir de febrero y la incorporación de una cláusula gatillo para activar mes a mes en base a los datos del INDEC para la Rama 17 (Metalúrgica), mientras que el sector empresario ofreció otorgar un anticipo del 15% “a cuenta de futuros aumentos”, a partir del 1ro de febrero.
El sindicato había convocado a un paro nacional por 24 horas para este miércoles que continuaría con un paro de 48 horas, para el 13 y 14 de marzo, y otro más de 72 horas, para la semana del 19, 20 y 21 del mismo mes, en el marco del plan de lucha decretado en julio del 2023, bajo la consigna “Primero la dignidad”.
Tras el anunció de la medida de fuerza escalonada de la UOM, el sector empresario pidió la intervención del gobierno, “se impone que esa autoridad tome la intervención que corresponda, decrete la conciliación obligatoria e intime al sindicato a dejar sin efecto las medidas anunciadas”, a lo que agregó que se realice “sin perjuicio de las medidas que las empresas puedan aplicar en el marco de los respectivos contratos individuales de trabajo”, exigieron los empresarios.
Participaron de la audiencia, además del propio Furlán por la parte gremial, la representación empresarial de la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica Argentina (CAMIMA), la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales Electrónicas (AFARTE), la Cámara Argentina de la Industria del Aluminio y Actividades afines (CAIAMA), la Federación de Cámaras Industriales de Artefactos para el Hogar (FEDEHOGAR), la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC) y la Asociación de Industrias Metalúrgicas de la República Argentina (ADIMRA).