Fuente: El Diario de Villa María

Gladys será querellante particular en el juicio oral a Rodolfo Delpino

La audiencia de debate fue fijada por la Cámara del Crimen local para el lunes 20 de diciembre, a las 9 de la mañana. El esposo de la mujer desaparecida en 2005 será juzgado por “privación ilegítima de la libertad personal, calificada por el tiempo de la privación”

Luego de casi tres años y 10 meses, la Justicia villamariense admitió a Gladys Bessonart como querellante particular (es decir, acusador privado) en la causa que se le sigue a Rodolfo Delpino como presunto responsable de la desaparición de su esposa, Mariela Bessonart, acaecida el 28 de septiembre de 2005.

En un fallo dictado el pasado viernes por los jueces Félix Martínez, Eve Flores y Marcelo Salomón, la Cámara del Crimen declaró la inconstitucionalidad de una norma legal que le impedía a Gladys seguir siendo parte tanto del proceso penal como civil en representación de la madre de ambas mujeres, Teresa Ramírez, quien falleció el 5 de noviembre de 2016 a los 85 años.

Qué dice el fallo

La resolución judicial señala textualmente lo siguiente:

“1) Admitir a Elida Gladys Bessonart en la prosecución de la acción civil en el límite de su cuota hereditaria.

2) Declarar la inconstitucionalidad del artículo 7 del Código Procesal Penal (CPP) de la provincia de Córdoba, solo en la expresión ‘herederos forzosos’.

3) Admitir a Elida Gladys Bessonart, como hermana de la víctima ausente, para continuar la intervención como querellante particular ya constituida en autos por Teresa Ramírez Bessonart, fallecida.

4) Rechazar la exclusión peticionada por la Defensa del imputado Delpino”.

 

Qué dice la ley

El mencionado artículo 7 del CPP, referido a la Querella Particular de un proceso judicial, establece que “el ofendido penalmente por un delito de acción pública, sus herederos forzosos, representantes legales o mandatarios, podrán intervenir en el proceso como querellante particular en la forma especial que este Código establece, y sin perjuicio de ejercer conjuntamente la acción civil resarcitoria”.

La expresión “herederos forzosos” alude a los descendientes (hijos), ascendientes (padres) y cónyuge (pareja) de la víctima de una causa, por lo que dicha norma no permite que otro familiar se constituya en una causa como querellante particular.

De acuerdo con esa legislación, Gladys Bessonart había quedado excluida del proceso cuando falleció Teresa Ramírez, hace poco más de cinco años.

 

Junto a su abogado

Sin embargo, el abogado villamariense Juan Manuel Tovo, quien asiste legalmente a la hermana de Mariela, el 1 de febrero de 2018 presentó en la Cámara un escrito mediante el cual planteó la inconstitucionalidad del referido artículo 7 del CPP y solicitó que Gladys pudiera continuar con la Querella en representación de su madre, y también con la acción civil en carácter de heredera.

Cabe señalar que el tribunal integrado por los jueces Martínez, Flores y Salomón se constituyó el pasado 31 de agosto y dos meses y medio después, más precisamente el 17 de noviembre, fijó fecha para realizar la audiencia en la que deberá comparecer Delpino como presunto autor del delito de “privación ilegítima de la libertad personal, calificada por el tiempo de la privación”.

Los miembros de la Cámara del Crimen dispusieron el lunes 20 de diciembre, a las 9 de la mañana, para la realización del juicio oral y público, aunque no se descarta que en los próximos días la Defensa de Delpino realice algún planteo jurídico que impida que el debate se lleve a cabo.

 

Nueva etapa del caso

El novedoso fallo judicial se conoce pocas semanas después que la fiscal Juliana Companys decidiera reanudar la búsqueda de Mariela y, en lo que va de esta nueva etapa del proceso, acumuló pruebas que no estaban incluidas en el expediente elaborado por su antecesor, el exfiscal Gustavo Atienza, jubilado en julio de 2017.

A fines de agosto pasado, Companys amplió la acusación contra Delpino, ya que lo imputó como supuesto autor responsable de “homicidio calificado por alevosía”, un grave delito penal que es reprimido con prisión perpetua.

Sin embargo, el esposo de Mariela permanece en libertad bajo una serie de condiciones determinadas oportunamente por la fiscal de la causa.