Fuente: La Voz de San Justo
Los caminos de la vida se entrelazaron para Miguel Vulecovich y dieron como fruto un libro que trascenderá las fronteras y llegará a los Balcanes, desde donde vino su familia hace mucho tiempo. El fútbol, la solidaridad, cumplir el deseo que su padre no pudo y su pasión por las palabras componen esta historia poco común para estos lares.
Su primer amor, el fútbol, le presentó también su primera gran decepción. A los 21 años se rompió los ligamentos y ello terminó poniéndole fin a su carrera de futbolista. Pero siguió ligado como entrenador y a la vez desarrollando una vocación solidaria que viene de familia.
Organizador del Partido de las Estrellas que siempre a fin de año convocaba a los destacados de la región para poder dar una mano a los necesitados, siempre miró más allá del fútbol. Cuando su padre enfermó, encontró en la escritura su «cable a tierra» y un viaje a la tierra de donde vino su familia terminó por cerrar el ciclo.
Su abuelo se vino desde Yugoslavia escapando de la guerra en 1926. Cuando sintió la necesidad de conocer sus orígenes, Miguel comenzó a indagar y así fue que dio con el Padre Branko, también llegado desde los Balcanes, que cumple una obra solidaria en el Chaco.
La charla lo terminó por decidir y así fue que emprendió un viaje que describe como «algo hermoso, la experiencia es única, muy difícil de explicar. A los dos o tres días de estar allá encontré lo que buscaba: en una aldea en lo alto de la montaña donde vivía mi abuelo todavía estaba la casa. También estaba la iglesia donde estaban las tumbas de mis bisabuelos. Fue una experiencia fantástica. Montenegro es como la provincia de Córdoba, una zona montañosa muy linda».
Esa experiencia trajo otro hito importante que derivaría en la concreción del impensado libro. «Al libro lo escribí hace muchos años, pero todo tiene que ver con todo, son historias que se van entrelazando. Mi viejo se enfermó de cáncer de pulmón cuando yo trabajaba como bobinador de motores eléctricos. Cuando terminaba esa tarea, me iba a dar fútbol y cuando volvía me ponía a escribir. Siempre me gustó hacerlo, tengo muchos escritos de fútbol y de otras cosas», contó.
Sumergido en la escritura fue encontrando un camino: «Me di cuenta de que empezó a salir un libro de una historia que yo había vivido. No es sobre fútbol, es una historia romántica, de amor, una novela. Mi cable a tierra en esos tiempos era escribir. Fui poniendo cosas mías y también mucha ficción para que se dé algo lindo y cuando me di cuenta estaba saliendo un libro».
«Lo estuve escribiendo durante 2 o 3 años y siempre lo tuve en un borrador. Estaba ahí, sin hacer nada», asegura.
Coronar la obra
Luego llegó el empujón: «Al regreso del viaje, el Padre Branko me presentó a Aleksandar Milovic que es un jugador de básquetbol que estuvo en muchos lados como España, Estados Unidos. Ahora está viviendo y jugando en el Chaco. A la vez es profesor en la universidad. Me comentó que sabía que yo había escrito un libro y me preguntó si no pensaba publicarlo».
«Me decía que yo tenía que coronar mi obra, así me incentivaba y así comenzó nuestra relación. Luego salió la idea de traducirlo, como descendiente, para publicarlo a fin de año en Serbia y Montenegro. El padre trabaja con una editorial y ya lo está traduciendo al serbio», comenta Miguel.
«Por eso digo que se entrelazó todo y concluyó con esto que sería coronar la obra», subraya.
Lo recaudado por el libro será destinado a la Escuela de Educación Especial N° 6 de Presidente Roque Saénz Peña, algo que no le es extraño a Miguel ni a su familia, porque siempre organizaron movidas solidarias para tender una mano a esa provincia. «Siempre con mi familia ayudamos a la gente del Chaco, con ayuda de la población de La Francia, también de Arroyito, Villa Concepción, San Francisco. Incluso llevamos cosas al Padre Aguilera en Corrientes, hicimos muchas cosas. Somos así», recuerda.
«Necesitan muchas cosas, así que vamos a hacer el esfuerzo. Ya compré algunas, desde Arroyito me hicieron una donación importante, la intendenta de La Francia también. Vamos a tratar de hacer felices a esas personas que menos tienen», agrega.
Mientras el libro se traduce al serbio y espera viajar para presentarlo en aquellas latitudes y se prepara para estrenarlo en plataformas digitales como Mercado Libre y Amazon, se sorprende por la atención que causó esta nueva faceta: «Quienes me conocen me conocen como entrenador de fútbol. Ahora que escribí un libro me están empezando a pasar cosas muy locas. Me llaman de todos lados y es muy lindo».
Asegura que el libro esconde una historia corta, de palabras fáciles de entender y que «lleva a imaginar muchas cosas».